
Balduino IV | Una historia de superación
El rey Balduino IV nació en 1161 y creció en la corte de su padre y, según su tutor, mostró una gran promesa como gobernante desde una edad temprana. Era un excelente jinete, poseía una memoria retentiva, un intelecto agudo y estaba “dispuesto a seguir buenos consejos”. Trágicamente, a la edad de nueve años, le diagnosticaron lepra, una enfermedad que en la Edad Media se interpretó como una señal del desagrado de Dios.